PANORAMA LGBTIQ EN COLOMBIA EN EL CONFLICTO ARMADO Y VIOLACIÓN DE DERECHOS HUMANOS Y CONSTITUCIONAL

Colombia como país latinoamericano en cuestión de derechos humanos no ha sido un estado referente de ejemplo para las demás naciones por el conflicto armado en el que hemos estado sumergidos durante los últimos 50 años. Un país donde ha primado la violencia, la guerra, la desigualdad, poco interés por las políticas públicas, guerras de poder, corrupción y evidentemente una falta de garantías frente a las libertades de expresión de cualquier género. Décadas donde hemos tenido que evidenciar claros ejemplos como comunidad de intolerancia y una vulneración frente a los derechos humanos por parte de grupos armados al margen de la ley, entidades estatales militares y policiales, grupos delincuenciales del común y claramente la poca y efectiva intervención del mismo estado colombiano.

Si bien es claro que venimos en un avance y en un proceso lento de evolución en los últimos años, con leyes, acuerdos de paz y entidades garantes en pro de los derechos ciudadanos, aún estamos a años luz de grandes países civilizados y desarrollados. Seguimos siendo carne de cañón y blanco fácil para todo lo anteriormente mencionado. Y si es fácil y sencillo atropellar derechos y la vida de cualquier colombiano en territorio nacional, se han preguntado ¿Cómo lo será para las mal llamadas “minorías “del colectivo LGBTIQ EN COLOMBIA?

Hablar de conflicto armado en Colombia es extremadamente extenso y difícil, ya que abarcar territorios, comunidades, grupos armados, posiciones políticas, víctimas y victimarios, razones y demás consecuencias del mismo harían de este post una completa enciclopedia. Por eso me base en algunas investigaciones y entidades serias que nos abren un poco más el panorama de los últimos años y que vale la pena leer. Paginas como DW, COLOMBIA DIVERSA, CARIBE AFIRMATIVO son claros ejemplos de ello y de donde les replicare información valiosa para que se informen y se actualicen sobre el tema de este post. Aclarando que algunas partes son de su completa autoría en cuanto a sus investigaciones y que menciono acá solo como parte educacional e informativa.

En una entrevista muy interesante realizada por DW a la abogada María Susana Peralta de la organización LGBTIQ de Colombia diversa nos contempla y nos aclara la importancia del conocimiento y la evolución del conflicto armado en el colectivo LGBTIQ.

La organización Colombia Diversa documenta los casos de al menos 30 personas de la comunidad LGBTIQ (lesbianas, gais, bisexuales y transgénero/hasta noviembre del 2021, lo que es una población muy pequeña notificada) que han sido víctimas de violencia por prejuicio en el conflicto colombiano.  ¿Pero cómo se define violencia por prejuicio? Es un concepto que inventó la filósofa colombiana María Mercedes Gómez, y consiste en explicar por qué ciertas personas son víctimas de unos crímenes que no pueden tener una motivación más allá del disgusto o el desagrado. Índica que una persona cuando opina algo, antes de conocer a otra persona, tiene un imaginario construido y alimentado por el contexto en el que vive. Sobre estos prejuicios que tiene, cree que su víctima puede ser una persona particularmente vulnerable, peligrosa o útil para sus propios intereses.

La población LGBTIQ es una población a la que matan con mayor frecuencia y con características distintas a la forma en la que se cometen otros homicidios, pero al estado parece no importarle. Es una violencia distinta, primero por los motivos, pero después es una violencia mucho más cruel y mucho más cercana al cuerpo, justamente porque lo que pretende sancionar es la sexualidad.

La violencia contra las personas LGBTIQ a partir de una comparación entre la guerrilla de las FARC y las Autodefensas Unidas de Colombia, eran muy similares, mas no iguales pero que siempre llevaban a lo mismo como la humillación, la ridiculización, la violación, el desplazamiento o la muerte. En las FARC había unos estatutos de conducta, las relaciones homosexuales estaban completamente prohibidas; si un miembro quería tener una pareja heterosexual que no fuera de las FARC, tenía que tenía que pedir permiso a su comandante. Entonces, en las FARC conocemos mucho más este tipo de disciplinamientos.

Los paramilitares propugnaban una sociedad hiperconservadora, en la que no había ni espacio para negociar ni para cambiar, y por eso su violencia fue mucho más cruel y letal. Si descubrían que alguien era una persona LGBTIQ, la mataban, muchas veces antes la violaban o torturaban. Era una violencia mucho más letal que pretendía expulsar mucho más fuertemente la diferencia.

La violencia de las FARC era menos letal, porque no querían ser igual a los paramilitares, que eran sus enemigos militares, pero también por los valores de la izquierda política que se supone que estaban detrás de su fundación. Antes que matar a una persona LGBTIQ, la lesionaban, cometían actos de violencia sexual, la amenazaban, y si después de que ya la había castigado no mejoraba, ahí sí llegó el acto de desplazamiento, homicidio o desaparición forzada. Las FARC y los grupos paramilitares compartían el desagrado y la intolerancia ante las personas LGBTIQ.

A las víctimas del Estado les da mucho miedo denunciar, parece que el Estado es mucho más efectivo en sus métodos coercitivos con las víctimas. El Estado nunca se va a desmovilizar. La gente víctima de las FARC y de los paramilitares van a un tercero para que les dirima el conflicto, pero las víctimas del Estado tendrían que ir ante el Estado mismo. Entonces les causa mucha desconfianza, son las víctimas más atemorizadas que hemos visto. No es por falta de casos, el ejército atemorizó y persiguió a las personas LGBTIQ igual que los paramilitares y las FARC, y fue mucho más exitoso en silenciar a sus víctimas.

La violencia contra personas LGBTIQ es un tema que hasta la fecha casi no se ha tocado en la justicia transicional y esto se debe uno por los sistemas judiciales del país, y por el otro lado, a nadie le interesa que esto se sepa, porque todos los actores armados han cometido violencia por prejuicio.”

Actualmente diversas organizaciones y defensoras del colectivo LGBTIQ entregan informes concretos a la comisión de la verdad, cuyo mandato es el primero a nivel mundial en contemplar el reconocimiento de las personas LGBTIQ víctimas del conflicto armado, pero que a la fecha NO ha sucedido nada con dichos informes entregados por las diferentes organizaciones. Y lo que el colectivo LGBTIQ busca con esta comisión de la verdad es hacer público todos estos atropellos, maltratos y asesinatos de nuestra comunidad que al estado no le importa y no quiere sacar a la luz pública nacional e internacional.

Hay que salir y buscar, contar y replicar todas estas historias nefastas por las que pasan personas como nosotros. Devolverles la confianza como ciudadanos y como personas frente a un sistema y un estado social de derecho. Hacer que la vida de estas personas cambie y que sea segura en su integridad física, psicológica y emocional. Hay que hacer recomendaciones sobre la DISCRIMINACIÓN que proviene de las sociedades, en particular la que viene del MACHISMO Y DEL PATRIARCADO. Tenemos que meterle la ficha a política pública en temas de educación sexual e identidades y orientaciones sexuales en escuelas públicas y privadas.

Aunque en Colombia al igual que algunos países de Latinoamérica y Europa ya existe el matrimonio igualitario falta mucha brecha por andar. Aún hay obstáculos por parte de la ley y de sus propios jueces que por sus creencias religiosas y sus opiniones personales No ejecutan su acto legal y cívico como lo indican las leyes de igualdad en este país, y esto también es un acto de violencia contra el colectivo LGBTIQ.

Colombia como país con derecho e identidad de género en américa latina ya cuenta con una legislación o algún procedimiento legal o judicial para garantizar derechos de las personas TRANS. Pero a nivel de aceptación DE DIVERSIDAD SEXUAL Colombia está a años luz en niveles de aceptación de las diferentes orientaciones sexuales e identidades de género comparadas con otras naciones, por ejemplo, España cuenta con aceptaciones del 88%, Alemania 87%, Argentina 74%, Chile 68%, México 61%, Brasil 60%, Venezuela 51%, Bolivia 43%, Salvador 34% y en Colombia estamos con niveles inferiores al 30 % desafortunadamente.

Pero si somos lideres a nivel de América latina en el total de personas asesinadas del colectivo LGBTIQ. Entre el año 2014 y el año 2019 en américa latina se reportaron 1.292 muertes de personas de nuestra comunidad. Colombia lidera con 542 muertes, México 402, Honduras 164, Perú 57, El Salvador 53, Republica dominicana 28, Guatemala 26, Paraguay 12, Bolivia 8. Sin contar las no registradas o denunciadas.

Y el panorama no es nada alentador en personas transexuales y transgénero asesinadas entre el año 2008 y el año 2017 en américa latina donde lidera Brasil con 171 muertes, México 56, Colombia 10 y van en aumento, argentina 7, El Salvador 7 y Venezuela 6 según los registros de notificación. Esto también sin contar las no notificadas.

Otra entidad que maneja mucho sobre este tema es CARIBE AFIRMATIVO una página seria y que en constante movimiento informa sobre múltiples temas LGBTIQ en diferentes ámbitos y claramente sobre el conflicto armado colombiano y nuestro colectivo. Tienen una interesante investigación muy completa que consta de 6 libros que pueden visualizar y leer en su página oficial. Se llama ENTRE SILENCIOS Y PALABRAS que habla del conflicto armado, construcción de paz y diversidad sexual y de género en Colombia.

El libro 1>factores de persistencia de las violencias contra personas LGBTIQ.

El libro 2>ser ocultas, conflicto armado y personas LGBTIQ en Arauca.

El libro 3>que las maricas no sienten? Conflicto armado y personas LGBTIQ en cauca.

El libro 4>somos las más visibles y las menos visibles, conflicto armado y personas LGBTIQ en Caquetá.

El libro5> somos el vallenato que canta bajito y todos quisieran callar, conflicto armado y personas LGBTIQ en magdalena y medio cesar.

El libro 6> impacto de las violencias, conclusiones y recomendaciones. Justicia, verdad, reparación y no repetición.

Vale la pena que le den una lectura a estos informes sobre todos para los que estamos interesados en salud, política pública y activismo LGBTIQ.

Recordemos que las violencias se configuran en un contexto de complicidad social en donde la sociedad profundiza los prejuicios y estereotipos negativos hacia las personas LGBTIQ, considerando que las violencias que reciben estas comunidades son necesarias y el sistema ejecutivo, legislativo y judicial, las instituciones estatales y en general las estructuras de gobierno en Colombia mantienen un legado histórico de discriminación y marginalización contra el colectivo LGBTIQ. Y aunque existen triunfos a nivel formal, como lo fue la despenalización de la homosexualidad y la amplia producción de jurisprudencia constitucional en materia de derechos fundamentales, todavía persisten las violencias y la vulneración de derechos humanos en nuestro colectivo.

Cabe resaltar en este post que las denuncias públicas de las victimas por graves hechos de violencia y la ineptitud de los sistemas judiciales del país en estos temas, nos muestra solo un claro panorama de impunidad, de victimización y de silenciamiento motivado por el señalamiento y la estigmatización. En pocas palabras nosotros como formadores de comunidades LGBTIQ dejamos de creer en las leyes y la protección de estado colombiano.

Colombia diversa en sus múltiples investigaciones según el registro único de víctimas reportan 1818 víctimas LGBTIQ POR DIFERENTES CAUSAS DE VIOLENCIA FISICA Y PSICOLOGICA, DESPLAZAMIENTOS, AMENAZAS, HOSTIGAMIENTOS, ATENTADOS, DELITOS CONTRA LA LIBERTAD Y LA INTEGRIDAD SEXUAL Y MUERTE. Y son subregistros, porque muchas veces estas personas no denuncian por temor o por vergüenza al qué dirán en la sociedad donde la victima pertenece y no menos importante por la falta de respaldo y de garantías que debería proteger con las leyes de este país a nuestros ciudadanos LGBTIQ.

De estas 1818 víctimas LGBTIQ, 366 fueron hechos por grupos paramilitares, 287 por grupos guerrilleros, y 1165 donde NO SE RECONOCE EL RESPONSABLE.

Datos más recientes de la defensoría del pueblo entre el año 2020 y el año 2021 al menos 98 personas de la comunidad LGBTIQ abrían sido asesinadas en Colombia, de los cuales 77 fueron homicidios y los restantes fueron feminicidios. Las principales víctimas son las mujeres trans 27, los hombres gays 14, y lesbianas 8. Mientras que las regiones de Colombia donde más se registran estos casos son magdalena y atlántico le siguen valle del cauca, cesar y sucre.

Claros ejemplos de persecución y maltrato a nuestro colectivo se ven a diario. Uno muy recordado fue el de vista hermosa, Meta, donde las FARC Y EP hostigaron de manera violenta personas LGBTIQ Y MAS AUN EN LA ZONA DE DESPEJO DEL CAGUAN unos años atrás. En otras zonas de Colombia LAS AUTODEFENSAS UNIDAS DE COLOMBIA en cabeza de su líder Marco Tulio Pérez Guzmán alias el “oso” para su satisfacción personal y de sus allegados sometía a los hombres gay y las mujeres trans a participar en contra de su voluntad en peleas clandestinas de boxeo hasta casi quedar moribundos y tirados desangrándose de los golpes como método de humillación y ridiculización por prejuicios.

Y PARA NO IR MUY LEJOS, tenemos el último caso reportado de asesinato este 17 de marzo del 2022, donde fue asesinado un hombre gay llamado JUAN DAVID BEDOYA en la ciudad de Medellín solo por su orientación sexual! Solo por una violencia sistemática contra personas con orientaciones sexuales e identidades y expresiones de género diversas. ¡¡¡Esto no puede seguir pasando en Colombia lectores!!! Debemos luchar por una patria justa, con tolerancia y respeto por el otro. En un estado donde se garantice la paz para todos y justicia social. De ahí la importancia de leer, de capacitarse y de replicar esta información. No pueden seguir asesinando personas del común, campesinos, gente del colectivo LGBTIQ, indígenas, negritudes, religiosos, LIDERES SOCIALES Y ACTIVISTAS. Esto solo pasara cuando el gobierno implemente todos los mecanismo jurídicos y estatales e invierta en formación educacional y continuar con su proceso de paz, en campañas de respeto y tolerancia y donde primen los derechos fundamentales y los derechos humanos de cada ciudadan/o/a/e.

Les dejo las páginas oficiales de estas dos maravillosas entidades que se les servirá de mucha ayuda: www.caribeafirmativo.lgbt y www.colombiadiversa.org